Cuando la oportunidad de emprender llegó a mi
vida sabía que lo más importante no eran los recursos económicos que iba a
requerir para iniciar dicho proyecto, más bien necesitaba una buena actitud y
la motivación de querer ser una persona exitosa.
También sabía que emprender implica riesgos y
que el resultado de toda actividad que decidamos ejecutar será incierto, pero
algo tiene que ser real y es la forma de asumir lo que vamos a emprender. Necesitamos
determinación y empeño sobre todo porque estaremos frente a una operación ardua
que nos demandará tiempo y la producción
de ideas creativas.
De mi experiencia en ese sentido ha sido de las
más extraordinarias, porque Dios mismo fue quien puso en mis manos lo que hoy
todos conocemos como Dulce Delicias Carola. Tenía un talento escondido desde
hacia 6 años y para una ocasión especial (el cumpleaños de mi jefa) salió a la
luz dejando a todos encantados. Ahí vi mi oportunidad sin dudar. Entendía
que si todos habían piropeado mi flan era
porque había calidad y el producto tenia que ser conocido.
Esa noche le entregué el proyecto de la
flanería al Señor en oración, pero ya ese mismo día había buscado el nombre del
negocio y los primeros 12 sabores que introduciría. Al día siguiente recibí la
confirmación cuando la jefa de mi jefa que no había comido del flan el día
anterior, porque no se encontraba en la oficina, al probarlo me dijo: “Carolin,
este es tu negocio. Quiero uno de café para mañana”. Ese fue mi primer pedido.
Así inició todo.
Y tú que me lees puedes pensar que fue una
chepa, que tuve suerte, en fin, puede existir todo un universo de posibilidades…
pero también te puedo decir que la oportunidad pudo llegar y yo quedarme
inmóvil aprovechando la zona de confort en la que me encontraba, ya que estaba
ejerciendo mi carrera en un medio de comunicación importante cuando muchos
profesionales colegas estaban sin trabajo.
Por eso hoy quiero decirte que si realmente
tienes deseos de superarte en la vida,
de construir tu propia historia y que esta pueda impactar positivamente en la
vida de los demás, te invito a que comiences a descubrir cuáles son tus
talentos y habilidades, y una vez los conozcas no dudes en evaluar una
posibilidad de negocio siempre y cuando tengas las ganas y el deseo de
emprender con disciplina.
Si me preguntas ¿Que se necesita para emprender?
Te lo puedo resumir en dos palabras: fe y acción. Como dice la palabra de Dios
que la fe sin obra es muerta, así mismo no hay empredimiento sin obra, sin
acción.
Y
finalmente te regalo esta frase del veterano emprendedor americano Michael
Gerber: “El emprendedor ve oportunidades donde quiera que enfoca su mirada,
mientras otros sólo ven problemas”.
Comienza a ver las oportunidades. Sé optimista,
perseverante y abraza un sueño.
CG.
2 comentarios:
Hola caro te sigo desde carnation,eres una forjadora.me encantan tus postres. felicidades.
Elys, muchisimas gracias. ¡Un abrazo!
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